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MensajearMorelia, Michoacán, a 9 de septiembre de 2024 – La relocalización de empresas (nearshoring) coloca a México en una posición estratégica para atraer inversiones internacionales y fortalecer su capacidad productiva, afirmó la doctora Diana Alarcón González, experta en política internacional, durante su conferencia magistral "Expectativas del Nearshoring y el papel de las instituciones de educación superior mexicanas", en la Universidad Michoacana de San Nicolás de Hidalgo (UMSNH).
Frente a alumnos, docentes e investigadores, Alarcón explicó que la reconfiguración de las cadenas de producción, impulsada por la rivalidad comercial entre Estados Unidos y China, ha hecho que las empresas estadounidenses busquen trasladar su producción a países cercanos, con México como uno de los principales beneficiados.
Este proceso de nearshoring no solo promete aumentar la inversión, sino también impulsar el desarrollo de regiones menos favorecidas, como el sur y sureste, al integrar a micro y pequeñas empresas en cadenas de valor más grandes.
La especialista destacó que el enfoque actual, respaldado por la presidenta electa Claudia Sheinbaum, busca evitar los errores cometidos en 1994, cuando la inversión extranjera se centró en explotar los recursos naturales y la mano de obra barata. Esta vez, se prioriza la creación de empleos bien remunerados, con altos niveles de capacitación, y el fortalecimiento de sectores con mayor sofisticación tecnológica.
Alarcón subrayó que las instituciones de educación superior jugarán un papel clave. Su capacidad para impulsar la investigación, la innovación y el desarrollo tecnológico será fundamental para modernizar la industria y garantizar que el nearshoring beneficie a todas las regiones del país.
Además, resaltó la necesidad de una transición hacia energías renovables, como la solar y eólica, para asegurar un crecimiento sustentable. Esto permitirá cuidar los recursos naturales y posicionar a México como referente internacional en sostenibilidad.
La doctora Alarcón concluyó que esta estrategia de nearshoring, ofrece a México una oportunidad única para consolidarse como un actor clave en la economía global, promoviendo un desarrollo incluyente, sostenible y con visión de futuro.
